ESTUDIO DEL GENESIS, CAPITULO 1, II PARTE

Los eruditos estiman que entre el versículo 1 y 2 del primer capítulo de Génesis hay un espacio de tiempo muy amplio, algo ocurrió entre estos dos versículos que la Biblia no nos dice. Dios creó los cielos y la tierra y luego la tierra estaba desordenada y vacía, la versión textual de la Biblia dice en su versículo 2 “y la tierra llego a estar desordenada y vacía”, para comprender mejor lo que las escrituras nos señalan, analicemos las palabras utilizadas en este versículo, estas son “Tohu (toju)” y “Vohu (Voju)” que significan confusión o desperdiciado y vano, vacio o vaciedad respectivamente, ¿Cómo fue que ocurrió esto?, El profeta Isaías nos dice que el Señor no creo la tiera en vano, Él la creo para que fuera habitada (Isaías 45:18), sin embargo el relato nos señala que la tierra estaba desordenada, en confusión y vacía, tanto en Isaías 45:18 como Génesis 1:2, son utilizadas las mismas palabras, el Señor no hizo la tierra desordenada y vacía, sin embargo llego a estar así, el relato continua, y nos señalan que además de estar desordenada y vacía “las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas”.

En las escrituras cuando hablamos de tinieblas, siempre se refiere a maldad, a oscuridad, la palabra que se ocupa en este texto es:

Kjoshék, que significa, oscuridad, miseria, destrucción, muerte, maldad,

Existe otra palabra para describir tinieblas y que aparece en otros versículos, y esta es la palabra Arafel, pero el significado de esta es oscuridad, penumbra, sombra, entenebrecimiento.

Para abismo, la palabra hebrea es Tejóm, que significa “Como una masa de agua que sube, se refiere a lo profundo, el mar principal o la provisión de agua subterránea.

Vemos esta imagen en el diluvio que se ajuste perfectamente al significado de Tejóm “Y se cerraron las fuentes del abismo y las cataratas de los cielos”. (Génesis 8:2),Esto es una imagen de la oposición que existe entre las tinieblas y la luz y que se da desde el principio, y lo podemos ver graficado en el relato del diluvio cuando este cesó:

“…y envió (Noé) un cuervo, el cual salió, y estuvo yendo y volviendo hasta que las aguas se secaron sobre la tierra. Envió también de sí una paloma, para ver si las aguas se habían retirado de sobre la faz de la tierra. Y no halló la paloma donde sentar la planta de su pie, y volvió a él al arca, porque las aguas estaban aún sobre la faz de toda la tierra”. (Génesis 8:7-9).

Tanto el cuervo como la paloma iban y venían y volaban sobre el agua, recordemos ¿Qué significado tienen las aguas en la Biblia? significan pueblos, muchedumbres, naciones y lenguas. (Apocalipsis 17:15), ¿que significado tiene una paloma en las escrituras?, veamos “y descendió el Espíritu Santo sobre él en forma corporal, como paloma, y vino una voz del cielo que decía: Tú eres mi Hijo amado; en ti tengo complacencia”. (Lucas 3:22).

Esto es el eterno conflicto que aqueja nuestra propia alma, que transita entre las tinieblas y la luz, por algún motivo la creación llegó a estar en confusión y vacía, el motivo las escrituras no lo relatan, pueden ser las hipótesis que la ciencia ha intentado explicar, o pueden ser otros motivos, pero creo que no lo explica, porque la razón es similar a nuestra propia vida, cada una es un mundo particular, nacimos como creación de Dios perfecta y sin embargo llegamos a estar separados de él, las tinieblas y la luz merodean nuestra existencia, nuestra vida fue confusa y vacía, hasta que viene el Señor y dice “Hágase la luz”, y se hizo la luz, la paloma no tenía donde posarse, el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas, hasta que encontró un lugar dentro de cada uno, no por nosotros sino por la obra del Mesías.

El espíritu de Dios se movía sobre los pueblos, pero no hallo donde posarse, en Lucas 3:22 viene y desciende sobre Jesucristo, y a través de Él, el espíritu de Dios viene a todos los creyentes,

Y en los postreros días, dice Dios, Derramaré de mi Espíritu sobre toda carne, (Hechos 2:17)

“Y dijo Dios: Sea la luz; y fue la luz. Y vio Dios que la luz era buena; y separó Dios la luz de las tinieblas”. (Génesis 1:3-4)

El apóstol Pablo describe esta escena:

“Porque en otro tiempo erais tinieblas, mas ahora sois luz en el Señor; andad como hijos de luz.” (Efesios 5:8)

Despiértate, tú que duermes, Y levántate de los muertos, Y te alumbrará Cristo (Efesios 5:14)

Aquel mundo dejo de estar en desorden, y Dios hizo todas las cosas nuevas.

“De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas”. (2 Corintios 5:17)

Todo es imagen de lo que vendría, se hizo la luz, vinieron las aguas, surgieron las primeras semillas y los primeros frutos.

En Egipto se hizo la luz, el Señor se reveló a su pueblo, pasaron las aguas, y vinieron los primeros frutos en el Sinaí cuando ellos aceptaron la Torah que el Señor les entregó.

No olvidemos que la tercera de las fiestas ordenadas por el Señor, es la fiesta de las primicias, donde se ofrecían los primeros frutos de la cosecha, las primeras semillas, esto representa la resurrección del Señor.

Mas ahora Cristo ha resucitado de los muertos; primicias de los que durmieron es hecho. (1 Corintios 15:20).

El tercer día de la creación los primeros frutos, el Señor mismo es la luz, pasó por las aguas, y fue la primicia de los que durmieron. Nada en la Biblia es casual todo tiene un motivo, aquellos que no han aceptado la verdad son incapaces de verlo, los científicos que han intentado explicar el nacimiento del universo tropezaran mil veces, el más brillante de estos tiempos Stephen Hawking, incluso llego a descartar a Dios como creador del universo, no han visto aún que la creación es una recreación de nuestra propia vida y de nuestra separación de Dios, y que además anuncia en todo su esplendor la venida del Mesías, del hijo de Dios.

El relato continua, y nos dice en el verso 28:

“Y los bendijo Dios, y les dijo: Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra, y sojuzgadla, y señoread en los peces del mar, en las aves de los cielos, y en todas las bestias que se mueven sobre la tierra”. (Génesis 1:28)

Este es el plan de Dios para el Hombre, y veamos el orden como se los da:

Fructificar, es la palabra hebrea Pará, que significa llevar fruto, crecer, Dar fruto, un fruto espiritual, la palabra nos dice que por sus frutos los conoceréis (Mateo 7:16), Pablo nos habla de los frutos “Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley”. (Gálatas 5:22-23), esos frutos los da el Espíritu de Dios, El Señor quería que le conociesen que tuviesen una relación con Él, de esa manera fructificarían.

Multiplicar, es la palabra hebrea Rabá, que significa aumentar cantidad, después de fructificar viene la multiplicación, como nos vamos a multiplicar primero si antes no tenemos las bases sólidas, primero los frutos, luego la multiplicación,

Llenar, palabra hebrea “MALE” que significa ser llenado, también significa embarazar, tanto a Noé como a Adán el Señor le dijo los mismo llenad la tierra.

Sojuzgar, palabra hebrea Kabash que significa pisotear, conquistar con violencia, someter, subyugar, el hombre debía someter la tierra que el Señor le entregaba, nuestra vida no esta exenta de luchas, cuando Dios sacó a Israel de Egipto y entraron en la tierra que les había prometido debieron conquistarla, someter a los pueblos que ahí estaban, en el nuevo testamento también ocurre ello, y Mateo nos dice que “Desde los días de Juan el Bautista hasta ahora, el reino de los cielos sufre violencia, y los violentos lo arrebatan”. (Mateo 11:12), vivimos en una lucha constante, el hombre se enfrenta a una oposición muy grande, pero el Señor nos dio un espíritu de valentía, para arrebatar esas promesas, para salir delante de los problemas, de nuestros conflictos.

Señorear, Rabá, pisotear, se refiere a pisotear el lagar cuando están las uvas y se pisan, pasar por encima del adversario, y tomar posesión y dominio de un lugar.

En el capitulo 9 de Génesis, el Señor vuelve a decir estas palabras a Noé, una vez que paso el diluvio, les dice “Fructificad, Multiplicaos y llenad la tierra”, sin embargo no le dice sojuzgad y señoread, les dice “El temor y el miedo de vosotros estarán sobre todo animal de la tierra…” otras versiones como la NVI y RV95 dicen en este texto, “Infundiréis temor y miedo a todo animal sobre la tierra…”, pero la palabra “infundiréis” no está en el texto original, en el dice textualmente “El temor y miedo de vosotros…”, me parece que existe una gran diferencia entre ambos textos, solo como comentario me parece que estas nuevas versiones de la Biblia me causan algunas dudas, insisto lo digo solo como comentario.

Temor, es la palabra hebrea Morá y viene de la palabra Yaré, que significa Temor reverente, espanto, miedo.

Miedo, es la palabra Hebrea Kjat, que viene de Kjatat, que significa acobardar, asustar por confusión.

La situación con Noé es distinta a Adán, el hombre ya había pecado, y ciertamente el hombre ya tendría que matar a algunos animales para vestirse y para alimentarse, el también había perdido la herencia y el dominio que tenía al principio, ahora a causa del pecado hay miedo y temor en el hombre.

El Señor creo todas las cosas en seis días y descanso al séptimo día, fueron días literales o un período de tiempo, debemos considerar que el tiempo no es el mismo para Dios que para nosotros, como no es el mismo para nosotros que para una mariposa. Hay misterios aún por develar recordemos los siguientes pasajes 2 Pedro 3:8 y Salmo 90:4 esto también es profético, todo nos habla del Mesías, recordemos siempre eso, al cuarto día aparece el sol, que equivale al nacimiento del sol de justicia, el Mesías y en sus alas traerá salvación (Malaquías 4:2), el gobierno del hombre sobre la tierra es de 6.000 y no más, este es el período de rebelión del hombre hacia Dios, y seis es número de hombre, al final de este período el Hombre por fin a sido perfeccionado para entrar en el período largamente anunciado en las escrituras, el descanso de Dios, el Séptimo día o el gobierno del Mesías por mil años en la tierra.

Y vio Dios todo lo que había hecho, y he aquí que era bueno en gran manera. Y fue la tarde y la mañana el día sexto. (Génesis 1:31)

Y vio Dios que todo lo que había hecho era bueno en gran manera, y descanso al séptimo día, me imagino yo que a admirar todo la obra que había, ponte a pensar en el amor de Dios, que creo todo un mundo, y cuando estuvo hecho, recién ahí puso al hombre, es como lo que hacemos nosotros mismos, cuando sabemos que viene un bebe, le habilitamos la habitación, la pintamos, le ponemos nubes en los cielos, dibujos, le compramos ropa, móviles, una camita para él y una vez que está todo listo, recién ahí llega el bebe a habitar aquel lugar que le preparamos, después comienza a crecer y a veces se convierte la habitación en un completo desorden, que también puede graficar nuestra condición, una vez que decidimos hacer las cosas por nuestra cuenta.