jueves, 26 de mayo de 2011

¿PORQUE SE AMOTINAN LOS PUEBLOS?


Este año ha sido muy generoso en manifestaciones y revoluciones, las que han contagiado diversas regiones del planeta, estas manifestaciones han trascendido al mundo árabe, lugar donde comenzaron y ya se están instalando en Europa. España fue protagonista la semana pasada de masivas manifestaciones debido al descontento de la población en sus gobernantes, lo que derivó finalmente en el que el partido oficialista resultará derrotado en las elecciones municipales que se celebraron el pasado fin de semana. Hoy tenemos el caso de Grecia, que comienza a movilizarse debido a las medidas de ahorro del gobierno ante el casi inevitable “default” de su economía, es decir ante la declaración de la quiebra del país, y el incumplimiento de sus obligaciones financieras con la unión europea, lo que puede arrastrar a otros países como Portugal e incluso a Italia a una situación similar. ¿Quienes son finalmente los afectados por esta situación?, siempre es la población, la que sintiéndose subvalorada y menospreciada, se han organizado a través de las herramientas tecnológicas de las que hoy disponemos, como son las redes sociales, y han salido a las calles a manifestar su descontento.

Los pueblos cansados de la explotación y los abusos, han decidido manifiestarse masivamente en las calles, reclamando los derechos que le han sido negado en algunos casos y robados derechamente en otros. Siempre hemos llevamos las situaciones al contexto bíblico, esa es nuestra tarea, y esta situación que vive nuestra actual sociedad no es ajena a ella. ¿Por qué se amotinan las gentes? (Salmo 2:1) se preguntan las escrituras, ¿piensan ellos cosas vanas?, ¿resultan estas revueltas y manifestaciones, vanos esfuerzos por reivindicar los derechos de la gente?, a la vista de los hombres es un buen y admirable intento, sin embargo para YHVH es un esfuerzo vano, ¿aquellas multitudes han acudido a su creador para obtener las respuestas que necesitan?, NO !!!, el Señor esta fuera de estos procesos que los hombres han iniciado. Los hombres han ignorado el consejo de Dios, y han buscado su propio camino, la solución a los males de nuestra sociedad está en el Hijo de Dios, el Mesías que inevitablemente volverá y tomara el control de un mundo que se derrumba irremediablemente, pues aun conociendo la solución la ignoran, aun cuando las propias Naciones Unidas han utilizado como estandarte las palabras del profeta Isaías:

“Y vendrán muchos pueblos, y dirán: Venid, y subamos al monte de YHVH, a la casa del Dios de Jacob; y nos enseñará sus caminos, y caminaremos por sus sendas. Porque de Sion saldrá la ley, y de Jerusalén la palabra de YHVH. Y juzgará entre las naciones, y reprenderá a muchos pueblos; y volverán sus espadas en rejas de arado, y sus lanzas en hoces; no alzará espada nación contra nación, ni se adiestrarán más para la guerra”. (Isaías 2:3-4).

El mundo ante la gran problemática que enfrenta, se prepara para recibir a quien aparentemente traerá la solución a los males que nos afectan, lamentablemente la elección del mundo no será la correcta, Yeshua lo dijo:

“Yo he venido en nombre de mi Padre, y no me recibís; si otro viniere en su propio nombre, a ése recibiréis”. (Juan 5:43)

El Salmo 2 nos dice: “Yo publicaré el decreto; YHVH me ha dicho: Mi hijo eres tú; Yo te engendré hoy. Pídeme, y te daré por herencia las naciones, y como posesión tuya los confines de la tierra. Los quebrantarás con vara de hierro; como vasija de alfarero los desmenuzarás” (Salmo 2:7-9)

Las revoluciones que se suceden en el mundo buscan traer la justicia, la democracia, la igualdad, valores por cierto muy altruistas, pero que han dejado de lado la verdadera justicia, el hombre busca solucionar sus problemas en base a lo que ellos piensan que es lo correcto, desechando el consejo del Señor, ciertamente los habitantes de la tierra buscan crear un reino en el cual se erguirá un falso rey, un falso mesías, incluso se atreverán a hacer guerra contra el verdadero rey cuando venga a tomar posesión de lo que le pertenece.

La situación que vemos hoy en día no es ajena a las escrituras, los pueblos reclaman sus derechos y salen a manifestarse a las calles para lograr sus objetivos, las escrituras también nos habla de esta situación, el salmo 2 nos habla de esta realidad que deberá afrontar el Mesías antes de su retorno, el libro de Apocalipsis también lo hace, los capítulos 2 y 3 nos dan un panorama de las características de los creyentes y de las congregaciones desde la resurrección del Mesías hasta su segunda venida, la última carta a la congregación en Laodicea, resulta una imagen exacta de la condición de la iglesia actual a la que Yeshua le dedica palabras no muy halagüeñas:

“Porque tú dices: Yo soy rico, y me he enriquecido, y de ninguna cosa tengo necesidad; y no sabes que tú eres un desventurado, miserable, pobre, ciego y desnudo” (Apocalipsis 3:17).

Además de estas duras palabras, etimológicamente Laodicea tiene un significado que nos habla de la situación que hoy afecta al mundo, veamos:

LAODICEA viene de dos vocablos griegos, LAOS cuyo significado es PUEBLO, y DIKE cuyo significado es DERECHOS, es decir, LAODICEA la cual es la última congregación, aquella que representa a los postreros tiempos, significa justamente los DERECHOS DEL PUEBLO, eso que hoy, miles en diversos lugares del mundo, salen a las calles a exigir. ¿Es esto una casualidad? nada en las escrituras es una casualidad, las escrituras nos hablan con miles de años de antelación de una realidad que hoy es evidente, en estos tiempos todos los grupos exigen sus derechos, los trabajadores, los estudiantes, los grupos originarios, las mujeres, los niños, los homosexuales, etc, etc.

¿Por qué se amotinan los pueblos? el salmo 2 se refiere al tiempo anterior al establecimiento del Reino de Dios, justamente esta época de la cual cada uno de nosotros es protagonista ¿Cuál es la solución para los manifestantes? La última opción en la solución de los problemas para el mundo es Dios, para ellos esa no es la solución, todos necesitan algo más tangible. Tampoco es su hijo, el Mesías prometido, a quienes estoy seguro que solo consideran una falacia y no una realidad que muy pronto llegará a materializarse, la solución para ellos está en las manos de los propios hombres, hoy los estados están tendiendo a debilitarse en beneficio de instituciones supranacionales, lo que inevitablemente llevara a una dictadura mundial la cual entregará soluciones ficticias a un mundo que está haciendo crisis en todos sus aspectos.

La revolución se extiende, todo el mundo reclama por sus derechos, los derechos del pueblo, es lo que el mundo hoy exige, es Laodicea presente en medio de nosotros, es lo que las escrituras nos dicen que iba a ocurrir en este tiempo postrero, Laodicea representa no solo a una congregación, si no a un mundo que huele a podrido, que se siente rico y autosuficiente, pero que es pobre, ciego y desventurado, la estatua que el hombre ha levantado muy pronto será derribada por una pequeña piedra que golpeará sus pies, y se convertirá en una monte que ha de llenar toda la tierra.

Es lamentablemente que el camino que el hombre ha elegido no sea el correcto, tal como al principio de la historia, los edificadores de esta nueva sociedad han desechado la piedra, y han elegido el ladrillo, esta moderna torre de babel que hoy se construye, esa que hoy se levanta , el Señor mismo será quien se encargará de derrumbarla.

No hay comentarios:

Publicar un comentario